La filosofía estoica de la antigüedad, que enseña cómo vivir en busca de la felicidad, es más relevante que nunca en la
La filosofía estoica de la antigüedad, que enseña cómo vivir en busca de la felicidad, es más relevante que nunca en la actualidad. Epicteto, un filósofo griego que vivió entre los años 55 y 135 d.C, es uno de los principales representantes de esta corriente de pensamiento, y dejó numerosas máximas que pueden ser útiles en el mundo de hoy.
La visión de la felicidad de Epicteto se basa en el discernimiento entre las cosas que dependen de nosotros y aquellas que no. La incapacidad de reconocer esta diferencia es uno de los principales errores que impiden alcanzar la verdadera felicidad en la sociedad actual.
Existen tres lecciones estoicas que pueden ser particularmente útiles en la vida moderna. La primera es la recomendación de acostumbrarse a estar incómodo para prepararse para la adversidad. Aprender a afrontar voluntariamente la incomodidad puede ayudar a desarrollar resiliencia y confianza, ya que las dificultades y los contratiempos son inevitables en la vida.
La segunda lección es la importancia de centrarse en lo que se puede controlar, mientras se acepta con calma lo que está fuera de nuestro control. Epicteto creía que la felicidad depende de la mente individual y no de los elementos externos. Asumir que existen cosas que no podemos controlar puede evitar que consideremos “desgracias” situaciones que en realidad no lo son.
La tercera lección estoica es la necesidad de aceptar la realidad tal y como es, sin deseo de cambiarla. La felicidad procede de lo que no se puede cambiar, actuando con sabiduría sobre lo que sí podemos cambiar, como la sabiduría o la paz interior. Además, el estoicismo propone mostrar indiferencia hacia circunstancias externas o los placeres materiales.
El estoicismo está experimentando un renacimiento en la actualidad, ya que enseña a afrontar los acontecimientos de la vida con razón y tranquilidad, eliminando las emociones negativas y desarrollando las positivas. Esta filosofía puede ser especialmente útil en un mundo en el que muchas personas se sienten abrumadas por la información y las circunstancias que no pueden controlar.
Epicteto y Marco Aurelio, el emperador romano que escribió las “Meditaciones”, son dos de los estoicos más relevantes de la historia. Su pensamiento sigue siendo relevante hoy en día, ya que ofrece herramientas para afrontar los desafíos de la vida con serenidad y sabiduría.